Lavamos bien el conejo, secar y trocear. Lo ponemos en un cuenco la noche antes y lo cubrimos con el vino tinto para macerarlo.
Pelamos la cebolla y el puerro y los cortamos, junto con la zanahoria, en cubos. Las añadimos al cuenco donde está el conejo. Machamos el clavo y los pimientos y sazonamos con el resto de hierbas el conejo en maceración. Lo dejamos 12 horas en el frigorífico.
Al día siguiente, retiramos el conejo, salamos y lo pasamos por harina.
En una cazuela, añadimos el aceite y sofreímos el conejo hasta dorarlo durante al menos 15 minutos.
Colamos las verduras de la maceración, guardamos el caldo y las trituramos hasta obtener un puré.
Lo añadimos a las verduras y lo dejamos todo durante 10 minutos a fuego suave.
Incorporamos el vino tinto y el caldo. Dejamos reducir el vino. Añadimos el laurel, tapamos y dejamos cocer a fuego mediante durante una hora, hasta que la salsa oscurezca y espese.
Servimos en una cazuela de barro.
Ingredientes
Instrucciones
Lavamos bien el conejo, secar y trocear. Lo ponemos en un cuenco la noche antes y lo cubrimos con el vino tinto para macerarlo.
Pelamos la cebolla y el puerro y los cortamos, junto con la zanahoria, en cubos. Las añadimos al cuenco donde está el conejo. Machamos el clavo y los pimientos y sazonamos con el resto de hierbas el conejo en maceración. Lo dejamos 12 horas en el frigorífico.
Al día siguiente, retiramos el conejo, salamos y lo pasamos por harina.
En una cazuela, añadimos el aceite y sofreímos el conejo hasta dorarlo durante al menos 15 minutos.
Colamos las verduras de la maceración, guardamos el caldo y las trituramos hasta obtener un puré.
Lo añadimos a las verduras y lo dejamos todo durante 10 minutos a fuego suave.
Incorporamos el vino tinto y el caldo. Dejamos reducir el vino. Añadimos el laurel, tapamos y dejamos cocer a fuego mediante durante una hora, hasta que la salsa oscurezca y espese.
Servimos en una cazuela de barro.