La dieta mediterránea y todo lo que significa se ha puesto de moda en los últimos años más allá de la cuestión puramente gastronómica, aunque lleva siglos ahí, manteniendo todas las virtudes que ahora se ensalzan: es saludable, sabrosa, sostenible, variada, nutritiva… Pero de un tiempo a esta parte, ayudada por el tirón gastronómico de países como España, tiene un reflejo institucional que se manifiesta en ejemplos como su distinción, hace cinco años, como patrimonio inmaterial de la humanidad según la Unesco.