Sopa de cebolla gratinada

DificultadPrincipiante
Rendimiento6 Raciones
Prep Tiempo1 min
 2 cebollas medianas
 1,5 l de caldo de carne o verduras
 2 cucharadas de aceite de oliva
 2 dientes de ajo
 2 ramitas de tomillo fresco
 1 vaso de vino blanco
 6 rebanadas de pan de uno o dos días
 2 cucharadas de harina de trigo
 Sal y pimienta
1

Pelamos y cortamos la cebolla en tiras finas. Calentamos el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio y añadimos la cebolla. Revolvemos la cebolla para cubrirlas con aceite de oliva. Dejamos cocinar, removiendo de vez en cuando durante 15 minutes hasta que la cebolla comience a ablandarse, hasta que estén doradas y caramelizadas, durante aproximadamente 45 minutos. Tenemos que tener cuidado con este paso, ya que este paso le dará el rico sabor a la sopa. Si las cebollas empiezan a quemarse o se enganchan, se puede añadir un poco de agua para desglasar la sartén.

Una vez que las cebollas estén caramelizadas, añadimos el ajo y el tomillo. Cocinamos uno o dos minutos más y luego añadimos la harina. Cocinamos durante dos minutos y añadimos la harina. Dejamos cocinar otros 2-3 minutos y después añadimos el vino blanco. Dejamos cocinar 2 minutos más para que evapore el alcohol.

Añadimos el caldo caliente. Removemos durante dos minutos para eliminar posibles grumos y dejamos cocinar a fuego medio durante unos 15 minutos más. Salpimentamos al gusto.

Colocamos la sopa de cebolla en cuencos individuales. Deben ser resistentes al horno. Ponemos una rebanada de pan del día anterior encima y espolvoreamos con queso rallado. Gratinamos en el horno a 200ºC. Servir.

Ingredientes

 2 cebollas medianas
 1,5 l de caldo de carne o verduras
 2 cucharadas de aceite de oliva
 2 dientes de ajo
 2 ramitas de tomillo fresco
 1 vaso de vino blanco
 6 rebanadas de pan de uno o dos días
 2 cucharadas de harina de trigo
 Sal y pimienta

Instrucciones

1

Pelamos y cortamos la cebolla en tiras finas. Calentamos el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio y añadimos la cebolla. Revolvemos la cebolla para cubrirlas con aceite de oliva. Dejamos cocinar, removiendo de vez en cuando durante 15 minutes hasta que la cebolla comience a ablandarse, hasta que estén doradas y caramelizadas, durante aproximadamente 45 minutos. Tenemos que tener cuidado con este paso, ya que este paso le dará el rico sabor a la sopa. Si las cebollas empiezan a quemarse o se enganchan, se puede añadir un poco de agua para desglasar la sartén.

Una vez que las cebollas estén caramelizadas, añadimos el ajo y el tomillo. Cocinamos uno o dos minutos más y luego añadimos la harina. Cocinamos durante dos minutos y añadimos la harina. Dejamos cocinar otros 2-3 minutos y después añadimos el vino blanco. Dejamos cocinar 2 minutos más para que evapore el alcohol.

Añadimos el caldo caliente. Removemos durante dos minutos para eliminar posibles grumos y dejamos cocinar a fuego medio durante unos 15 minutos más. Salpimentamos al gusto.

Colocamos la sopa de cebolla en cuencos individuales. Deben ser resistentes al horno. Ponemos una rebanada de pan del día anterior encima y espolvoreamos con queso rallado. Gratinamos en el horno a 200ºC. Servir.

Sopa de cebolla gratinada